Aprovechar los nuevos modelos de negocio.
Los nuevos modelos de negocio generan ideas y valores agregados que muchas veces son más apreciados por los consumidores que incluso las características propias de los bienes o servicios que se ofertan.
Los nuevos enfoques nos exigen participar en el cuidado del medio ambiente y la responsabilidad social. Empresas con años de operación y crecimiento constante en ocasiones interpretan la sustentabilidad como un gasto que no genera un resultado positivo e inmediato para su desarrollo.
La verdad es que es muy fácil incorporarnos a esta ola de beneficios para todos de manera responsable, comprometida y participativa en la cual no solo estamos aportando al cuidado de nuestro entorno, sino a la mejora de resultados económicos por la importancia de estas actividades.
Es muy sencillo volver la sustentabilidad un estandarte de tu empresa y obtener grandes beneficios con sencillos pasos.
Desarrolla y comparte objetivos verdes.
Involucra a tus colaboradores en el alcance de objetivos que tengan que ver con el cuidado de recursos como agua, luz, papel, etc.
Planea estrategias que puedas aplicar a corto plazo y comiences a ver mejoras en la reducción de gastos; estas estrategias tienen que ser integrales y que se apliquen desde la Gerencia general hasta la parte operativa.
De pequeñas acciones podrás reducir gastos e incrementar ingresos que podrás destinar a otros aspectos.
Busca opciones de energía.
Hoy en día es muy fácil implementar sistemas que permitan la generación de energía a bajo costo, por ejemplo los sistemas interconectados de paneles fotovoltaicos que permiten reducir drásticamente tus pagos de electricidad.
Si desarrollas objetivos verdes, se tiene que estructurar las herramientas necesarias para el logro de estos objetivos.
La inversión de un sistema fotovoltaico tiene una vida útil de 30 años aproximadamente y el retorno de inversión es de menos de 8 años por lo cual te quedan 22 años de gracia y si a esto añades que existen beneficios fiscales que permiten que se pague el sistema, sólo es cuestión de decidirse.
Clasifica desechos.
Clasifica los desechos no solo en orgánicos e inorgánicos sino en los componentes, múltiples empresas obtienen ingresos de la venta, incluso de estos desechos ya que en la actualidad el vidrio, el pet, distintos metales, cartón entre otros pueden ser una fuente de ingresos, por mínima que parezca la cantidad que obtengas, podría pagar insumos como el café, servilletas, limpiadores y demás que necesitas en tu oficina.
También pueden desarrollar un taller en el que tus colaboradores aprendan a utilizar los desechos orgánicos, como restos de café para generar composta y con esto obtienes una actividad de integración y abono para el cuidado de los jardines y plantas.
Desarrolla una cadena de suministros eficiente y ecológica.
La selección de proveedores tanto de insumos y transporte que tengan una visión ecológica, te servirán para darle un valor agregado a tus productos o servicios, busca formar una cadena de suministros eficaz, pero que tenga responsabilidad ambiental, de esta manera no solo monetizas los beneficios que ofertan sino también colaboran en el cuidado del planeta.
Vuélvete empresa verde.
Busca la manera de que todas las acciones que se llevan a cabo en tu empresa en pro del medio ambiente sean reconocidas por una entidad oficial, con este tipo de reconocimientos entrarás en los indicadores y en el entorno de empresa sustentable, el reconocimiento se volverá prestigio y este a su vez se verá reflejado en mayores clientes.
Grítale al mundo lo que haces.
Ya eres una empresa con una filosofía inspiradora y sustentable, haz logrado incluir a toda tu estructura en los objetivos ecológicos, tus productos o servicios tienen valor agregado, ahora solo tienes que darlo a conocer.
Estructura una campaña de marketing en los canales publicitarios más eficaces para que todas las acciones sean conocidas por tus clientes, tus clientes potenciales y el público en general.
Fuente: @Entrepreneur